Una noche de otoño
Vacío desgarrador, oprime mi incierta alma, dolor, mucho dolor, sonrisas fingidas, pastillas para dormir, lagrimas cayendo por el pavor, puño cerrado, abrirlo y nada, nada, ni un solo suspiro de aliento, no sentir su latido en mi pecho, esperar mucho y recibir migas, sentirte una hormiga carroñera, agarrar todo lo que encuentres, pensando erróneamente de mil se podrá formar uno. Seguir andando, mientras una pipa con sabor a sal cae sobre el pie derecho, esas malditas luces reflejando en tus ojos, pero no ves nada, nada, cero profundidades, mucho caos, tener todo, carecer de ganas. Música de melancolía, que no ayuda, gente feliz, actuando demasiado bien, que no reconforta, ese nudo en la garganta que avisa que vas a llorar, mientras pagas una barra de pan repito tener todo, pero en otoño sentir que no tienes nada, absolutamente nada.