Autodefensa

Mis dudas aparecen,

mi autodefensa se manifiesta,

como un rayo de sol

traspasando la constelación,

maldita autodefensa emocional,

que no deja escapar

toda mi irracionalidad.

Autodefensa que me protege

por miedo a lo idealizado,

por ser una farsa inventada

por algunos pocos,

que juntos son multitud.

Autodefensa que no me deja sentir

ese aborrecible dolor,

que rompe todos los flujos de mi cuerpo,

dejándome tirado en el vacio.

Autodefensa que me protege

de esa soledad,

que me abraza, 

que me quiere,

que me ayuda,

que me acompaña,

que me escribe en el ático,

que puedo comprar con maquillaje de sombra.

Autodefensa, que no deja amar,

no permite bailar canciones prohibidas,

por miedo a un pasado que se manifiesta.

Autodefensa, que no me deja soñar,

por el miedo a golpearme en altamar,

y no poder salir nadando,

ahogándome en la profundidad.

Autodefensa que otorga motivos,

a los ecos de mi tarde soñada.

Autodefensa que no puedo defender,

que no puedes entender,

que no entiendo,

y me ahoga.